Parece una pregunta fácil de responder, pero la verdad es, que no lo es. La respuesta obvia es "si estas dormido es sueño y si no lo estás, entonces es realidad", pero es un poco más complejo que eso. Yo digo que cuando uno sueña sí hay algo de realidad en ello, ahí estás ¿no? y el resto de las situaciones y las personas también, con voces originales, olores, sonidos, sensaciones. . . todo.
Muchas veces me ha pasado, y no me gusta. . . me decepciona mucho darme cuenta que no es realidad cuando me despierto. Afortunadamente, es raro que mi mente me prepare pesadillas como sistema de entretenimiento mientras duermo. Entonces podría decir que sí, generalmente tengo dulces sueños. . . y hay veces que son tan dulces. . . que me encantaría no despertarme nunca y quedarme a ver el final de la historia. Justo como hace dos días.
Tengo que decir que me había auto-censurado para no escribir este tipo de cosas, pero pues. . . hoy sí.
No me dí cuenta de lo que había pasado, no sé cómo fue que llegamos a ese lugar y tampoco importaba mucho. Sólo estabas ahí con tu sonrisa de siempre y yo hacia las bromas que acostumbro hacerte sólo para oir tu risa que me contagia.
¿Ya sabes no?. . . era una casa fantástica clavada en los pies de una montaña, con un bosque cerrado que parecía que quería tragarnos, la calle estaba húmeda, el aire frío, se escuchaba el sonido de unos grillos y olia a lluvia que recién se ha terminado.
La casa era de un solo nivel, con muchos ventanales de piso a techo que veían al bosque o a sí misma, era toda blanca y se sentía caliente igual que tu boca cuando nos despedimos. El guión de la noche era una vez más, y para no perder la costumbre, medio de suspenso. . . medio de aventura y medio de ese tipo de historias que ya conoces.
¿Qué más? pues sólo eso. El sueño es mio y para mi, no se cuentan porque dicen que no se cumplen. Que raro es todo esto. . .
¡Salta!. . . o algo.
Rata Blanca
"La leyenda del Hada y El Mago"
Muchas veces me ha pasado, y no me gusta. . . me decepciona mucho darme cuenta que no es realidad cuando me despierto. Afortunadamente, es raro que mi mente me prepare pesadillas como sistema de entretenimiento mientras duermo. Entonces podría decir que sí, generalmente tengo dulces sueños. . . y hay veces que son tan dulces. . . que me encantaría no despertarme nunca y quedarme a ver el final de la historia. Justo como hace dos días.
Tengo que decir que me había auto-censurado para no escribir este tipo de cosas, pero pues. . . hoy sí.
No me dí cuenta de lo que había pasado, no sé cómo fue que llegamos a ese lugar y tampoco importaba mucho. Sólo estabas ahí con tu sonrisa de siempre y yo hacia las bromas que acostumbro hacerte sólo para oir tu risa que me contagia.
¿Ya sabes no?. . . era una casa fantástica clavada en los pies de una montaña, con un bosque cerrado que parecía que quería tragarnos, la calle estaba húmeda, el aire frío, se escuchaba el sonido de unos grillos y olia a lluvia que recién se ha terminado.
La casa era de un solo nivel, con muchos ventanales de piso a techo que veían al bosque o a sí misma, era toda blanca y se sentía caliente igual que tu boca cuando nos despedimos. El guión de la noche era una vez más, y para no perder la costumbre, medio de suspenso. . . medio de aventura y medio de ese tipo de historias que ya conoces.
¿Qué más? pues sólo eso. El sueño es mio y para mi, no se cuentan porque dicen que no se cumplen. Que raro es todo esto. . .
¡Salta!. . . o algo.
Rata Blanca
"La leyenda del Hada y El Mago"