martes, 23 de marzo de 2010

ÁRBOL DE GRULLAS

Hay días que son más cabrones que otros. Ayer fue uno de esos, me refiero a los cabrones y no a los otros.

Cuando me levanté me asomé por mi ventana como lo hago siempre y vi que el cielo era azul intenso, de ese azul característico de los días de primavera en que el sol brilla incluso en la sombra.

No importa lo bonito que estuviera el cielo, el calor me estaba sofocando desde que salí a la calle, cuando llegué a la oficina lo primero que supe fué que no cerraríamos un negocio que parecía en la bolsa y así, con el transcurso de las horas, el día se fue confirmando como lo decía al principio, en uno de los cabrones.

Llegó la hora de la comida y al regresar, mientras comentábamos sobre cualquier tema sin prestar atención a lo que sucedía en nuestro camino, algo nos llamó y levantamos la mirada para encontrarnos con un árbol de grullas. No recuerdo si ya había mencionado que me cagan las frases del club de los optimistas y espero que no suene como tal, pero el hecho de encontrarnos con semejante regalo para la ciudad al menos a mí, me cambió el día.


El autor dejó unas instrucciones en papel naranja fosforescente, enmicadas por si acaso llueve y a una altura lejos del alcance de los niños y los perros meones (no los estoy comparando). Ahi explicaba que hay una leyenda donde se dice que a aquel que logre hacer 1000 grullas de papel se le cumplirá un deseo. Al reverso, una invitación a encontrar un punto de paz debajo del árbol para pedir un deseo y tomar una de las grullas.

No estoy muy seguro de cuál es la canción que le iría mejor a este post pero ya, de por sí está cursi lo del arbolito y las figuritas, que ya termine todo cursi. . . ¿qué chingados?.

"Lemon Tree"
Fool's Garden